domingo, 10 de mayo de 2009

Historia de Antonio Marco, de 3ºESO-A

Mi experiencia con un vaso de leche, 1ºParte.

Todo empezó una lluviosa mañana de sábado, yo estaba muy cansado, ya que la noche anterior me acosté muy tarde, así es, me acosté a las 23:00 horas, y a mi lado tenía el maldito reloj que compré en los chinos, el que nunca suena a la hora que lo programas y las agujas se quedan enganchadas cada vez que pasan por las 4:51 horas, pero la china que me lo vendió se negó a cambiármelo.
El clima era frío, de modo que fui corriendo a ponerme esas zapatillas tan calentitas de estar por casa que tanta ansia tenia por estrenar; las prisas nunca son buena compañía, y con eso me refiero a que al ir a ponérmelas me clavé la etiqueta con el precio. Hoy en día cada vez que me pongo esas zapatillas recuerdo exactamente lo que me costaron, creo que eran 10€.
Tenía mucha prisa por ir al baño, cosa que no habría pasado si anoche mi primo, (no me acuerdo de su nombre) no me hubiese convencido para ver quien se bebía antes 5l. de agua, que por supuesto, gané yo.
No pude esperar, de modo que hice pis en las macetas de la vecina, pero esa historia y la de la multa que me pusieron prefiero dejarla para otro día.
Una vez pagados los 350€ de la multa, se me pasaron las ganas de hacer nada, y me volví a la cama, pero recibí una llamada que tampoco traía nada bueno.
La grúa se me estaba llevando el coche, de modo que…
¡Uich!, ahora que caigo, yo no tengo coche… lo más seguro es que fuese la bicicleta, ¿pero claro…? La grúa me parece que no se lleva bicicletas.
De todos modos ya hace casi un mes que paso todo esto y no me acuerdo bien, pero el caso es que tuve que bajar.
Cuando volví… ¡Ya me acuerdo! Fui a renovar el DNI, pero no se por que era urgente. En fin, que cuando volví tuve que ir a comprar el pan, y yo con el único pensamiento de: -¿Cuándo podré tomarme mi vaso de leche?
Al parecer, antes de desayunar hay que hacer un montón de cosas.
Mi madre me dio 1€ para comprar el pan, y como ese día me levante con el pie izquierdo nada me salía bien.
La mal hecha (no sé cómo se escribe, ya que nunca he tenido que escribir esa palabra). Lo que iba diciendo es que ese día no les habían salido mal hechas, y tuve que esperar a me deformasen una barra normal de pan.
Por cierto máma, han subido 0,10€, la panadera dice que es por la crisis.
De camino a mi casa, me resbalé en un charco y me hice una herida en la rodilla, aparte de caérseme la barra de pan al suelo y mojarse enterita, pero mi madre dijo ese día que el pan estaba muy bueno (es lo que tiene secar el pan con el secador del pelo).
Ya he llegado a mi casa, ¿pero… podré tomarme ya mi querido vaso de leche?


Continuará…

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