martes, 13 de enero de 2009

Una Carta de Paula, de 3ºESO B

CARTA PARA UNA AMIGA

Querida amiga:

Hemos pasado muchos momentos juntas, buenos y malos, he compartido mi infancia y mi inocencia contigo y hemos descubierto muchas cosas, desde pequeñas coincidíamos en todo, almas gemelas. Nunca he discutido contigo, tú me has ayudado, yo te he ayudado y en la mayoría de mis recuerdos estas tú. Me he dado cuenta de que he pasado toda mi vida contigo y ahora tú te has alejado completamente de mí, me has abandonado y estoy triste.
Un día de verano descubrí que ya no contabas conmigo para nada, te empezaste a juntar con otras personas, ahora tus amigos y te fuiste olvidando de mi, yo no quería darme cuenta de lo que pasaba, pensaba que al volver el nuevo curso te volverías a acordar de mi, pero me equivoqué, estuve muy preocupada y lo sigo estando, has cambiado mucho, ya no eres la misma, ya no te reconozco.
Me sentí sola durante mucho tiempo, porque tu no habías sido la única que me lo había hecho, mis dos mejores amigas me habían dejado de lado de la noche a la mañana. No sé cómo expresar todo lo que sentí en aquel momento, me preocupé porque no estaba segura si la culpa era mía y si la que había cambiado era solamente yo, lo consulté y yo seguía siendo la misma, lo malo de toda esta situación es ocultar la rabia y el dolor que sientes, en aquel momento les habría dicho muchas cosas, pero hubiera sido peor. La verdad es que me he desilusionado con la ’’AMISTAD’’, siempre he visto que mis abuelos, mis padres, mis tíos…No tienen ni idea de donde estás la mayoría de sus amigos de la infancia, pero yo pensaba que eso no iba a pasar conmigo, yo era de amigas para siempre, es la misma desilusión que la que recibe un niño al descubrir que los reyes magos no existen. Podía pasar de cualquier forma, pero sin ningún motivo, no me lo creo.
Al final tuve que hablarlo con alguien, sin detalles. Me quedé muy a gusto al contárselo y sobretodo al ver que me escuchaba. Me sentía la culpable de todo, pero al pensarlo de verdad me di cuenta de que yo era la única que quería arreglar esa relación y que yo era la víctima de todo, la que se preocupaba. En un acto de rabia te desearía lo peor, pero en verdad se que no, pero creo que no te puedo perdonar lo que me has hecho porque no solo me has abandonado, me has hecho muchas cosas mas. Aun pienso en ello, pero estoy mucho mejor y le doy las gracias a aquellas personas que me han escuchado, porque yo solo pedía eso GRACIAS. Yo también pienso cambiar, seré más optimista, dejaré de preocuparme un poco por los demás y empezaré a hacerlo por mí.

AÑO NUEVO, VIDA NUEVA
Paula Oñate Sánchez

1 comentario:

Anónimo dijo...

Esta carta ha llegado al corazón de muchos lectores. La verdad yo no hubiera podido expresar tatos sentimientos a la vez...Ya aprovechando el comentario quería mandar un saludo a todos los amigos del mundo que están para toda la vida y no hacen nada malo para sus amigo, porque un amigo es muy especial, no se gana sino que se va haciendo cada vez mas amigo hasta llegar al punto en que no lo quieres perder nunca. Creo que a casi todos alguna vez nos ha pasado algún caso en que hemos compartido risas con estos amigos, enfadarnos por tonterías y hasta dejarnos de hablar por un tiempo. Pero cuando se pierde la amistad se pierde para siempre o, si se recupera, ya no vuelve a ser como la del principio, Hasta aquí mi omentario.

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