martes, 25 de noviembre de 2008

Resumen del Cantar del Cid, por Johana, de 3ºESO-B

Resumen del poema de Mio Cid.

El destierro de Mio CID.
El Rey de Granada Almudafar, quería atacar al Rey de Sevilla, Almutamiz, (estos dos se odiaban a muerte), Almudafar, tenia `amistades', o contactos muy poderosos, conde García Ordoñez, y Fortún Sánchez -- yerno del Rey don García de Navarra - y Lope Sánchez... todos estos, querían calentar al Rey de Sevilla, el Cid, no le gusto mucho lo que iban a hacer así que, les mando unas cartas suplicándoles que no atacaran al Rey de Sevilla. El Rey de granada y su `tropa' pasaron de las suplicas del Cid, y atacaron al Rey de Sevilla, Almutamiz, el Cid reunió fuerzas y se enfrento al Rey de Granada, derrotándole. Todo lo que consiguió en esa batalla, se lo llevó al Rey de Sevilla. Este le dio el sobrenombre de CID CAMPEADOR, el Cid lo agradeció, y su Rey Alfonso VI, se sentía orgulloso de su vasallo. La gente se sentía envidiosa, y empezó a hablar mal del Cid, el Rey como tenia algo de rencor, por algo que le había hecho en el pasado el Cid, no tardo mucho en escucharlos. El Cid estaba muy contento, pero de repente, llegó una carta diciendo que sé fuera del reino en un plazo de unos nueve días, reúne a sus vasallos, y estos se destierran con él, se van de Vivar, pero en Burgos nadie se atreve a hospedarle, ya que el Rey ha dicho que el que lo hospede, ¡que se prepare!. Así es que el Cid y sus vasallos, siguieron su camino, llegó Martín Antolinez, para proveer de bienes al Cid, como el Cid estaba empobrecido se le ocurrió hacer unas arcas, y llenarlas de arena, y vendérselas a Raquel, y Vidas (unos judíos), se trató y se las vendió por unos seiscientos marcos.
El Cid parte hacia Cardeña, mientras que Martín Antolinez se vuelve a casa. El Cid se despide de su mujer y de sus hijas y le deja al abad don Sancho unos 150 marcos para que cuide a su familia y le dice que por cada uno que gaste él le dará cuatro más. Se despide y se va (con él se van un centenar de castellanos),
Caminan toda la noche hasta llegar a Castejón, que cae en poder del Cid (por sorpresa). Más adelante en el reino moro de Toledo, tributario del Rey Alfonso, se marcha (pasa de largo porque no quiere lidiar con el Rey Alfonso). El Cid acampa sobre Alcocer, y se enfrenta a los moros que son muchos más que él, derrota a los moros, y se lleva un gran botín, tiene clemencia con los moros, y los pone a servir. Más adelante, el Cid se va de aquí, y vende el castillo de Alcocer a los moros. Entra en el reino del Rey de Barcelona, y este se pone echo una furia, el Cid trata de calmarlo, pero el Rey le ataca, vence el Cid y hace prisionero al Rey, el cual quiere morirse de hambre, el Cid no lo permite y lo deja marchar a cambio de que coma algo.

Cantar segundo, cantar de las bodas.
A partir de aquí, el Cid se dirige a Valencia, donde poco a poco vence a los moros y al Rey de Sevilla, y se hace con todo el reino de Valencia, manda unos regalos al Rey Alfonso. Este los acepta y perdona al Cid y permite que este se lleve a sus hojas y a su mujer, a valencia, Minaya, que es el intermediario, se lo agradece, y se va. Los Infantes que ven que el Cid se hace rico y que esta forrado, y se quieren casar con las hijas del Cid, hablan con el Rey Alfonso, y este le dice arreglan una cita con el Cid, en estas vistas (en el río Tajo) acuerdan que se casen y se casan, el representante del rey Alfonso, que es Minaya, casa a los Infantes con las hijas del rey, el Cid y sus hijas están muy contentos. Pasados unos días cuando el rey marroquí, llamado Bucár, quiso conquistar valencia, los Infantes se echaron atrás en la batalla, y el Cid les dijo que no hacia falta que lucharan.

Cantar tercero, cantar de corpes
Estando el Cid dormido, el león que tenia, se escapó los Infantes se asustaron, y se escondieron, y el Cid se enfrentó al león y lo acobardó. Entonces los Infantes fueron objeto de risas y de bromas. Para vengarse, decidieron ir a Carrión y llevarse a las hijas del Cid, y maltratarlas por el camino, así hicieron y cuando el Cid se enteró avisó al rey don Alfonso y le dijo que quería concertar una corte en la que el pudiera retar a los Infantes de Carrión, y así vengar el mal que le habían hecho a su hijas. El rey Alfonso acepto, y quedaron un día determinado para realizar la corte, ese día el Cid llegó y pidió a los Infantes que le devolvieran las espadas, Colada y Tizón, ellos se las dan, el Cid vuelve a reclamar los tres mil marcos que les habían dado, ellos como ya se los habían gastado, le pagaron con especies de Carrión. Entran en la corte los Infantes de Navarra y Aragón, que piden al Cid la mano de sus hijas, y este las acepta, y de nuevo las pone en manos de rey don Alfonso. Los retos de los del Cid a los de Carrión: martín Antolinez, con Diego González, vence Martín. Muño Gustioz, vence a Asur González Pedro Bermúdez vence a Fernando. Los del Cid vuelven a valencia con la cabeza alta y el Cid casa a sus hojas con los Infantes de Aragón y Navarra, están muy felices y se acaba el cantar.


El Cantar de mio Cid es un cantar de gesta anónimo que relata hazañas heroicas inspiradas libremente en los últimos años de la vida del caballero castellano Rodrigo Díaz de Vivar. Se trata de la primera obra narrativa extensa de la literatura española en una lengua romance.
Está escrito en castellano medieval y compuesto alrededor del año 1200. El poema se inicia con el destierro del Cid, primer motivo de deshonra, tras haber sido acusado de robo. Este deshonor supone también el ser desposeído de sus heredades o posesiones en Vivar y privado de la patria potestad de su familia.
Tras la conquista de Valencia, gracias al solo valor de su brazo, su astucia y prudencia consiguen el perdón real y con ello una nueva heredad, el señorío sobre Valencia, que se une a su antiguo solar ya restituido. Para ratificar su nuevo estatus de señor de vasallos, se conciertan bodas con linajes del mayor prestigio cuales son los infantes de Carrión.
Pero paradójicamente, con ello se produce la nueva caída de la honra del Cid, debido al ultraje de los infantes a las hijas del Cid, que son vejadas, malheridas y abandonadas en el robledal de Corpes.
Este hecho supone según el derecho medieval el repudio de facto de estas por parte de los de Carrión. Por ello el Cid decide alegar la nulidad de estos matrimonios en un juicio presidido por el rey, donde además los infantes de Carrión queden infamados públicamente y apartados de los privilegios que antes detentaban como miembros del séquito real. Por el contrario, las hijas del Cid conciertan matrimonios con reyes de España, llegando al máximo ascenso social posible.
El Cantar de Mio Cid se diferencia de la épica francesa en la ausencia de elementos sobrenaturales, la mesura con la que se conduce su héroe y la relativa verosimilitud de sus hazañas.
Además está muy presente la condición de ascenso social mediante las armas que se producía en las tierras fronterizas con los dominios musulmanes (lo cual supone un argumento decisivo de que no pudo componerse en 1140, pues en esa época no se daba ese «espíritu de frontera» y el consiguiente ascenso social de los caballeros infanzones de frontera).

Resumen del contenido
1.-Primera etapa: Alfonso envía a don Rodrigo a cobrar las parias del rey de Sevilla; el Cid encuentra revuelta la Andalucía mora; el rey de Granada y unos cristianos atacan las tierras del rey de Sevilla, y el Cid sale en defensa del sevillano derrotando a los contrarios.
2.-Segunda etapa: El rey de Sevilla agradece el servicio al Cid, que vuelve a castilla con las parias. Con motivo de una correría don Alfonso por Andalucía, don Rodrigo, que se encuentra enfermo, queda en guardia del reino. Los moros atacan entonces las tierras cristianas, y el Cid las defiende con una victoriosa incursión por tierras de Toledo. Esto enfada al rey, que, movido por los enemigos de don Rodrigo, lo destierra.
3.-Tercera etapa: Don Rodrigo se dispone a obedecer la orden de destierro y reúne a los suyos y les dice que si quieren acompañarlo. Alvar Fáñez le ofrece la compañía de amigos y vasallos, y el Cid abandona Vivar.

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